
Blefaroplastia de párpado inferior
Se evalua previamente las características del párpado, grado de tensión y laxitud, edad, características de las bolsas, surcos, etc.
El tipo de acceso a las bolsas se puede realizar por vía interna, transconjuntival o por la piel.
Esto va a depender de la evaluación previa. Así en personas jóvenes en las que no precisen acortamientos de piel, la vía de extracción de las bolsas será la interna. Por la vía interna a veces no es necesario dar puntos.
Esta vía requiere menos tiempo quirúrgico.
La vía externa a través de la piel se practica debajo de las pestañas, siendo imperceptible posteriormente, y es más larga, pero sirve para ajustar mejor el exceso de piel.
Además de retirar las bolsas, podemos y debemos en muchas ocasiones realizar ajustes del párpado en su ángulo lateral (Tira Tarsal lateral, cantopexias, cantoplastias). Esto se hace para dar más firmeza al párpado.No siempre es necesario quitar las bolsas de grasas. En ocasiones lo que hacemos es trasladar esta grasa a las zonas donde aparezcan surcos, con el fin de rellenar y mejorar el aspecto de ojo hundido.
Riesgos y complicaciones.
Son muy infrecuentes. Véase Consentimiento informado
Hematoma: es la complicación más frecuente y natural. Su duración es variable y no suele dejar secuelas ni cicatrices.
Cicatrices: la cicatrización de la piel depende de la variabilidad de cada paciente, siendo imprevisible de antemano, aunque hay una serie de características que ayudan a predecir su evolución: tabaquismo, pieles muy oscuras, exposición al sol, enfermedades metabólicas, características raciales pueden hacer que las cicatrices se comporten de forma anómala, favoreciendo la aparición de queloides.
Ectropión: es la rotación del párpado hacia fuera (eversión) puede aparecer en el párpado inferior y se corrige con una nueva cirugía. A veces es pasajero y mejora con masajes.
Retracción: es el descenso del párpado inferior o el ascenso del superior, producido por un exceso en el acortamiento de la piel o por fibrosis de tejidos internos. Requiere una nueva cirugía.
Lagoftalmos: imposibilidad de cerrar los párpados. Se produce por un exceso en la extracción de piel. Requiere nueva cirugía con injertos de piel.
Ceguera: se produce por exceso de tracción de las bolsas, o por hemorragia interna, no por la externa. Su frecuencia es extremadamente baja.

Evolución
El hematoma de los párpados superiores suele depositarse en los inferiores y a veces baja hasta el cuello. Su duración es muy variable, siendo desde 15 días hasta mes y medio en casos menos frecuentes.
Lo habitual es que al mes no se noten los hematomas y apenas la cicatriz.
La cicatriz va evolucionando con el tiempo, siendo un proceso gradual, considerándose estable a los 6 meses. Durante este tiempo cambiará su textura, apariencia y color. Por tanto es de vital importancia su cuidado con protección solar y aplicación de masajes.
La cicatriz final suele ser una línea fina blanquecina.
Los resultados de la cirugía del párpado superior suelen durar muchos años en torno a 10 o incluso ser permanentes.
En el párpado inferior los resultados suelen ser más definitivos pero también puede haber más complicaciones.